Antes de escribir este boletín, he estado pensando mucho en lo que nuestro Señor le dijo a Marta:
¿Cuántos de nosotros estamos tan ocupados en cosas en esta tierra que consideramos tan necesarias que nos olvidamos de cosas importantes como la familia, la salud y Dios? Lo que Marta pensaba que era necesario, nuestro Señor le dijo que no lo era. Ahora, cambiemos su nombre en el pasaje y pongamos el nuestro allí. ¿Acaso estamos afanados y preocupados en tantas cosas que nos estamos perdiendo la única cosa que es realmente necesaria? María, la hermana de Marta, detuvo todo lo que estaba haciendo y “sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra” (Lucas 10:39). Ella escogió la buena parte. ¿A cuántos de nosotros no nos gustaría sentarnos a los pies de Jesús y escucharlo enseñar? ¡Hacer eso será tan maravilloso en ese hermoso día! Si bien Él no está caminando entre nosotros hoy en día, todavía podemos sentarnos y escucharlo predicar y enseñar a través de nuestro estudio de la Biblia. Es por esa razón que estamos tan agradecidos a Dios por la obra del Señor que tenemos la bendición de hacer en la Escuela Bíblica En Línea. Estudiamos y ayudamos a muchos a estudiar Su Palabra todos los días. Buscamos lecciones que ayuden a crecer y edificar a nuestros hermanos. Buscamos maneras de explicar la Palabra de Dios de manera simple a quienes aún no han obedecido Su voluntad. Identificamos temas, a veces sensibles o controversiales, que necesitan ser abordados bíblicamente. Y cuando surge la oportunidad, visitamos congregaciones para informarles de todos los recursos que están disponibles a través de la Escuela. Un hermano comentó recientemente en una de nuestras publicaciones en redes sociales,
Mantengámonos ocupados para el Señor, eligiendo esa única cosa que es necesaria, la buena parte, y esa es la Palabra de Dios. Deseo hacerles saber que la mitad de las anotaciones del curso sobre el libro de Hechos ya han sido traducidas y adaptadas al español, y muy pronto estaremos lanzando la lección en video sobre “Apuestas”. Les agradecemos por su deseo de estudiar la Palabra de Dios y de hacerlo con nosotros. Les alentamos a continuar estudiando, y a hacerle saber a sus conocidos sobre la Escuela y los recursos que esta ofrece para nuestro crecimiento espiritual. ¡Dios les bendiga ricamente y a sus familias! A Él sea la gloria hoy y siempre. |